Privacidad a fuerza
“La extraña leyenda urbana sobre Miguel de la Madrid en Coyoacán”
Si
no lo sabe, ahora es cuando: Miguel de la Madrid es reptiliano. Cuando
Cathy O’Brien fue víctima de un experimento de control mental por parte
del ejército norteamericano, fue enviada a México para servir de
prostituta al ex presidente; solo que este se transformaba en un reptil
humanoide para satisfacer sus deseos… o al menos eso asegura la
conspiranoica O’Brien en quien más tarde David Icke se inspiró para
crear su teoría reptiliana. Una teoría alucinante que asegura que los mayas comenzaron sus
sacrificios de vírgenes para satisfacer a los lagartos. Ellos... están
entre nosotros….
Coyoacán tiene su propio rumor sobre el expresidente. Cierta tarde mientras estaba en funciones, fue a su casa en Parras #46 solo para notar desde su jardín un rascacielos que se asomaba al otro lado de la calle. Angustiado de que los inquilinos pudieran verlo y atentar contra su vida en un tiempo donde ya todos los odiaban, ordenó tajantemente que los arquitectos colocaran unos alerones a todas las ventanas que tuvieran vista a su casa.
Coyoacán tiene su propio rumor sobre el expresidente. Cierta tarde mientras estaba en funciones, fue a su casa en Parras #46 solo para notar desde su jardín un rascacielos que se asomaba al otro lado de la calle. Angustiado de que los inquilinos pudieran verlo y atentar contra su vida en un tiempo donde ya todos los odiaban, ordenó tajantemente que los arquitectos colocaran unos alerones a todas las ventanas que tuvieran vista a su casa.
Casa de Miguel de la Madrid en Coyoacán |
Es verdad, el curioso edificio de Universidad #1601 solo tiene los alerones “decorativos” en un lado del edificio, la que da a la vieja casa de Miguel de la Madrid. Sin embargo los escépticos del autoritarismo, desmienten el rumor asegurando que era una estrategia arquitectónica para evitar que el sol diera de frente a los departamentos.
Entre el mito y la leyenda, a los habitantes de Coyoacán les encanta mencionar aquella curiosa historia. Un simpático rumor de ventanas tapiadas quizá, pero que para un pequeño grupo de personas, convencidos de que los Illuminati o los masones controlan al mundo con ayuda de lagartos gigantes, podrían estar ocultando mucho más que la privacidad del presidente…
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